domingo, 3 de septiembre de 2017


PRIMERA LECTURA

Soy objeto de burla por anunciar la Palabra del Señor.

MEDITACIÓN

¿Es Dios un seductor de personas? Tal parece que sí, pues así lo deja ver el profeta: es como un fuego que arde en su corazón y que quiere darlo a conocer al pueblo, pero éste no lo entiende y no lo acepta. Está herido de amor, seducido, y quiere que todos sientan lo que él siente, pero es imposible. Pues los otros (nosotros) no se dejan vencer por el amor divino, sino que buscan otras cosas, otros dioses, una vida sin compromiso. Pero el Señor no se deja vencer, sino que, haciendo uso de su infinita misericordia, busca seducir a los suyos y conducirlos a la salvación.

EL EVANGELIO DEL DIA

El que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo.

REFLEXIÓN

Jesús supo discernir muy bien la voluntad de Dios, por eso, conociendo la suerte que le espera en Jerusalén, está decidido a proclamar la Palabra de Dios aun a costa de su vida. Nada puede detener el fuego que le consume por anunciar el amor de Dios, ni las amenazas de las autoridades, ni la impertinencia de Pedro, ni el dolor de la cruz. Por el contrario, si queremos ser sus discípulos, si queremos hacer la voluntad de Dios, si queremos alcanzar la vida nueva y eterna, debemos renunciar a todo, tomar nuestra cruz de cada día y seguirlo. No es una llamada al sufrimiento ciego, sino al seguimiento verdadero, el que da identidad a los que no se acomodan a los criterios de este mundo.

¿Estoy dispuesto a tomar mi cruz con amor y sentido sobrenatural?

Oración: Ayúdame, Señor, a afrontar con valentía las cruces que se presentan en mi vida, para encontrar en la pasión de Cristo el camino de la conversión.

Amén.


Shalom!

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