domingo, 30 de septiembre de 2018

Evangelio del Día


Domingo 30 de Septiembre de 2018

“¡OJALÁ TODO EL PUEBLO FUERA PROFETA!”


PRIMERA LECTURA

NÚMEROS 11, 25-29

“¿Estás celoso de mí? ¡Ojalá todo el pueblo fuera profeta!”

En aquellos días, el Señor bajó en la nube, habló con Moisés y, apartando algo del espíritu que poseía, se lo pasó a los setenta ancianos. Al posarse sobre ellos el espíritu, se pusieron a profetizar enseguida. Habían quedado en el campamento dos del grupo, llamados Eldad y Medad. Aunque estaban en la lista, no habían acudido a la tienda. Pero el espíritu se posó sobre ellos, y se pusieron a profetizar en el campamento. Un muchacho corrió a contárselo a Moisés: "Eldad y Medad están profetizando en el campamento." Josué, hijo de Nun, ayudante de Moisés desde joven, intervino: "Señor mío, Moisés, prohíbeselo." Moisés le respondió: "¿Estás celoso de mí?"?¡Ojalá todo el pueblo del Señor fuera profeta y recibiera el espíritu del Señor!". 

Palabra de Dios.


SALMO RESPONSORIAL: 18

R. / “Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón”

La ley del Señor es perfecta
y es descanso del alma;
el precepto del Señor es fiel
e instruye al ignorante. R.

La voluntad del Señor es pura
 y eternamente estable;
los mandamientos del Señor son verdaderos
y enteramente justos. R.

Aunque tu siervo vigila
para guardarlos con cuidado,
¿quién conoce sus faltas?
Absuélveme de lo que se me oculta. R.

Preserva a tu siervo de la arrogancia,
para que no me domine:
así quedaré libre e inocente
del gran pecado. R

SEGUNDA  LECTURA

SANTIAGO 5, 1-6

“Vuestra riqueza está corrompida.”

Ahora, vosotros, los ricos, llorad y lamentaos por las desgracias que os han tocado. Vuestra riqueza está corrompida y vuestros vestidos están apolillados. Vuestro oro y vuestra plata están herrumbrados, y esa herrumbre será un testimonio contra vosotros y devorará vuestra carne como el fuego. ¡Habéis amontonado riqueza, precisamente ahora, en el tiempo final! El jornal defraudado a los obreros que han cosechado vuestros campos está clamando contra vosotros; y los gritos de los segadores han llegado hasta el oído del Señor de los ejércitos. Habéis vivido en este mundo con lujo y entregados al placer. Os habéis cebado para el día de la matanza. Condenasteis y matasteis al justo; él no os resiste. 

Palabra del Señor.


EVANGELIO DEL DÍA

MARCOS 9, 38-43. 45. 47-48

“El que no está contra nosotros está a favor nuestro. Si tu mano te hace caer, córtatela”

En aquel tiempo, dijo Juan a Jesús: "Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no es de los nuestros." Jesús respondió: "No se lo impidáis, porque uno que hace milagros en mi nombre no puede luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a favor nuestro. Y, además, el que os dé a beber un vaso de agua, porque seguís al Mesías, os aseguro que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos pequeñuelos que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te hace caer, córtatela: más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos al infierno, al fuego que no se apaga. Y, si tu pie te hace caer, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida, que ser echado con los dos pies al infierno. Y, si tu ojo te hace caer, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el reino de Dios, que ser echado con los dos ojos la infierno, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga."

 Palabra del Señor.


REFLEXIÓN

¡Ojalá todo el pueblo fuera profeta!

Las lecturas de hoy tienen una enseñanza muy clara. En la primera, tomada del libro de los Números, Dios habla con Moisés, y ante el agobio que éste siente por la tarea de formar y conducir a su pueblo a través del desierto, decide tomar parte de su espíritu y distribuirlo entre un grupo de ancianos para que le ayuden en su misión. Pero enseguida surge la incomprensión –y la envidia– contra los que, sin ser elegidos, profetizan en su nombre. Y Moisés, que conoce al Señor, lejos de enojarse por esta acción de Dios, exclama: “¡Ojalá todo el pueblo fuera profeta!”. El profetismo que sueña Moisés está muy bien diseñado por el concilio Vaticano II. Todos los cristianos tienen esta condición de profetas, ya que participan de la misión profética de Cristo. El profeta no es un adivino ni un visionario del futuro, sino el que descubre la presencia de Dios en el mundo y, con el testimonio de su vida, llama la atención para que sus contemporáneos encuentren esa presencia de lo absoluto que sigue hablándonos en los ambientes más insospechados.
Jesús también ve a sus discípulos escandalizarse por la conducta de alguien “que no es de los nuestros”, pero que está expulsando demonios, y les dice: “No se lo impidan… porque está a nuestro favor”. La enseñanza de Jesús es muy clara, si lo seguimos, debemos estar abiertos a todo lo bueno y positivo que está presente en el mundo, porque siempre es signo profético, una manifestación del amor de Dios, venga de donde venga.

“Como profetas de esperanza, somos el presente de la sociedad y de nuestra Iglesia, los que podemos construir una nueva civilización del amor” (Papa Francisco).

Oración: Señor, que mis palabras y mis actos den razón de mi esperanza y mi fe. Amén.

“Para construir la civilización del amor, nuestras palabras y actos deben dar razón de la esperanza y la fe en Dios”



sábado, 29 de septiembre de 2018

Evangelio del Día


Sábado 29 de Septiembre de 2018

Santos Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael

“MENSAJEROS DE DIOS”


PRIMERA LECTURA

DANIEL 7,9-10.13-14

“Miles y miles le servían”

Durante la visión, vi que colocaban unos tronos, y un anciano se sentó; su vestido era blanco como nieve, su cabellera como lana limpísima; su trono, llamas de fuego; sus ruedas, llamaradas. Un río impetuoso de fuego brotaba delante de él. Miles y miles le servían, millones estaban a sus órdenes. Comenzó la sesión y se abrieron los libros. Mientras miraba, en la visión nocturna vi venir en las nubes del cielo como un hijo de hombre, que se acercó al anciano y se presentó ante él. Le dieron poder real y dominio; todos los pueblos, naciones y lenguas lo respetarán. Su dominio es eterno y no pasa, su reino no tendrá fin. 

Palabra de Dios.



SALMO RESPONSORIAL: 137

R. /” Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor”

Te doy gracias, Señor, de todo corazón;
delante de los ángeles tañeré para ti,
me postraré hacia tu santuario. R.

Daré gracias a tu nombre:
por tu misericordia y tu lealtad,
porque tu promesa supera a tu fama;
cuando te invoqué, me escuchaste,
acreciste el valor en mi alma. R.

Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra,
al escuchar el oráculo de tu boca;
canten los caminos del Señor,
porque la gloria del Señor es grande. R.


EVANGELIO DEL DÍA

JUAN 1,47-51

“Veréis a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre”

En aquel tiempo, vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: "Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño." Natanael le contesta: "¿De qué me conoces?" Jesús le responde: "Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi." Natanael respondió: "Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel." Jesús le contestó: "¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores." Y añadió: "Yo os aseguro: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre." 

Palabra del Señor.


REFLEXIÓN

Mensajeros de Dios

“Ángel” significa “mensajero, enviado”. Las intervenciones directas de Dios son realizadas por los seres celestes conocidos como ángeles. Así lo vemos en las lecturas de hoy. El libro de Daniel describe una visión fantástica donde se contempla el trono y la corte angélica de Dios que están a su servicio; el Apocalipsis pone de manifiesto la presencia salvadora de Dios en la historia, simbolizada por el fiero combate entre Miguel y sus ángeles contra el dragón. Y en el evangelio, en el diálogo entre Jesús y Natanael, se mencionan a “los ángeles de Dios subiendo y bajando sobre el Hijo del hombre”, como profecía que se hará realidad en el misterio pascual, cuando al abrirse el cielo se podrá contemplar a los ángeles de Dios.
Para los cristianos la figura de los ángeles evoca también la resurrección. Los hombres resplandecientes que custodian la entrada a la tumba excavada en la roca, invitan a la comunidad a no buscar a Jesús entre los muertos. Por eso, no debemos entender a estos seres como figuras desvinculadas de la acción de Dios, ya que su presencia nos permite reconocer la manifestación del Señor en nuestra historia. A través de ellos nos encomendamos a Dios mismo que se manifiesta siempre de manera prodigiosa (salud: Rafael, entendimiento: Gabriel, fortaleza: Miguel). Y nosotros tenemos la posibilidad de contemplar a los ángeles de Dios si estamos unidos al misterio pascual del Señor.

¿Estoy atento para descubrir la presencia del Señor en mi vida? ¿Soy portador de alegría, paz y armonía para los que me rodean?

Oración: Manifiesta, Padre, tu generosa providencia a través de tus santos ángeles, protégenos del mal, ayúdanos a comprender tu Palabra y concédenos la salud. Amén.

“Seamos portadores de alegría, paz y armonía para los que nos rodean”



viernes, 28 de septiembre de 2018

Evangelio del Día


Viernes 28 de Septiembre de 2018

“¿QUIÉN ES JESÚS PARA MÍ?”


PRIMERA LECTURA

ECLESIASTÉS 3, 1-11

“Todas las tareas bajo el sol tienen su sazón”

Todo tiene su tiempo y sazón, todas las tareas bajo el sol: tiempo de nacer, tiempo de morir; tiempo de plantar, tiempo de arrancar; tiempo de matar, tiempo de sanar; tiempo de derruir, tiempo de construir; tiempo de llorar, tiempo de reír; tiempo de hacer duelo, tiempo de bailar; tiempo de arrojar piedras, tiempo de recoger piedras; tiempo de abrazar, tiempo de desprenderse; tiempo de buscar, tiempo de perder; tiempo de guardar, tiempo de desechar; tiempo de rasgar, tiempo de coser; tiempo de callar, tiempo de hablar; tiempo de amar, tiempo de odiar; tiempo de guerra, tiempo de paz. ¿Qué saca el obrero de sus fatigas? Observé todas las tareas que Dios encomendó a los hombres para afligirlos: todo lo hizo hermoso en su sazón y dio al hombre el mundo para que pensara; pero el hombre no abarca las obras que hizo Dios desde el principio hasta el fin. 

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL: 143

R. / “Bendito el Señor, mi Roca”

Bendito el Señor, mi Roca,
mi bienhechor, mi alcázar,
baluarte donde me pongo a salvo,
mi escudo y mi refugio. R.

Señor, ¿qué es el hombre para que te fijes en él?;
¿qué los hijos de Adán para que pienses en ellos?
El hombre es igual que un soplo;
sus días, una sombra que pasa. R.

 
EVANGELIO DEL DÍA

LUCAS 9, 18-22

“Tú eres el Mesías de Dios. El Hijo del hombre tiene que padecer mucho”

Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó: "¿Quién dice la gente que soy yo?" Ellos contestaron: "Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas". El les preguntó: "Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?" Pedro tomó la palabra y dijo: "El Mesías de Dios". El les prohibió terminantemente decírselo a nadie. Y añadió: "El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y letrados, ser ejecutado y resucitar el tercer día". 

Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

¿Quién es Jesús para mí?

 De la oración, momento íntimo de confrontación con el Padre, surgen los buenos deseos, los más grandes interrogantes. Jesús sabe que ha sido enviado para anunciar la salvación, otorgar el perdón y devolver la vida al pecador. Pero, ¿qué piensan de Él sus discípulos y el resto de la gente? Por eso lanza dos preguntas fundamentales: ¿Quién dice la gente que soy yo? Y ustedes ¿quién dicen que soy yo? Jesús no es el líder político que esperaba el pueblo judío, el que entrará triunfante y victorioso en brioso corcel, sino el que entra humilde y sencillo, montado sobre un burrito. Por eso, para evitar ese falso mesianismo que rondaba en la mente de la multitud Jesús advierte que el Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser rechazado por los poderosos, ser condenado a muerte y resucitar al tercer día. También hoy estamos invitados a reflexionar sobre quién es Jesús para nosotros: el todopoderoso Hijo de Dios, que está en el cielo, alejado totalmente de nuestra realidad, o el Señor manso y humilde de corazón, que se conmueve ante el dolor humano; qué lugar ocupa en nuestro corazón, en nuestros pensamientos, afectos, palabras y acciones. En medio de las agitaciones de cada día, hagamos una pausa para buscara Jesús, meditar su Palabra y acatar su mandamiento de amar y hacer el bien a los demás; “hay tiempo para todo”.

Los momentos más importantes de la vida de Jesús estaban precedidos por la oración, ¿también nosotros hacemos de ella nuestra forma de vida?

Oración: Señor, tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que murió en la cruz, el que me tiende la mano a pesar de mi debilidad. No permitas que me separe de ti. Amén.


“El Hijo de Dios, el Mesías, el que murió en la cruz, es quien nos tiende la mano a pesar de nuestra debilidad”

jueves, 27 de septiembre de 2018

Evangelio del Día


Jueves 27 de Septiembre de 2018

“JESÚS ES LA NOVEDAD DE DIOS”


PRIMERA LECTURA

ECLESIASTÉS 1, 2-11

“Nada hay nuevo bajo el sol”

¡Vanidad de vanidades, dice Qohelet; vanidad de vanidades, todo es vanidad! ¿Qué saca el hombre de todas las fatigas que lo fatigan bajo el sol?. Una generación se va, otra generación viene, mientras la tierra siempre está quieta. Sale el sol, se pone el sol, jadea por llegar a su puesto y de allí vuelve a salir. Camina al sur, gira al norte, gira y gira y camina el viento. Todos los ríos caminan al mar, y el mar no se llena; llegados al sitio adonde caminan, desde allí vuelven a caminar. Todas las cosas cansan y nadie es capaz de explicarlas. No se sacian los ojos de ver ni se hartan los oídos de oír. Lo que pasó, eso pasará; lo que sucedió, eso sucederá: nada hay nuevo bajo el sol. Si de algo se dice: "Mira, esto es nuevo", ya sucedió en otros tiempos mucho antes de nosotros. Nadie se acuerda de los antiguos y lo mismo pasará con los que vengan: no se acordarán de ellos sus sucesores.

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL: 89

R. / “Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación”

Tú reduces el hombre a polvo,
diciendo: "Retornad, hijos de Adán."
Mil años en tu presencia
son un ayer, que pasó;
una vela nocturna. R.

Los siembras año por año,
como hierba que se renueva:
que florece y se renueva por la mañana,
y por la tarde la siegan y se seca. R.

Enséñanos a calcular nuestros años,
para que adquiramos un corazón sensato.
Vuélvete, Señor, ¿hasta cuándo?
Ten compasión de tus siervos. R.

Por la mañana sácianos de tu misericordia,
y toda nuestra vida será alegría y júbilo.
Baje a nosotros la bondad del Señor
y haga prósperas las obras de nuestras manos. R.


 EVANGELIO DEL DÍA

LUCAS 9, 7-9

“A Juan lo mandé decapitar yo. ¿Quién es este de quien oigo semejantes cosas?”

En aquel tiempo, el virrey Herodes se enteró de lo que pasaba y no sabía a qué atenerse, porque unos decían que Juan había resucitado, otros que había aparecido Elías, y otros que había vuelto a la vida uno de los antiguos profetas. Herodes se decía: "A Juan lo mandé decapitar yo. ¿Quién es este de quien oigo semejantes cosas? Y tenía ganas de verlo. 

Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

Jesús es la novedad de Dios

El pasaje del evangelio de hoy no cumple con la sentencia de Qohélet: “Nadie se acuerda de los antiguos”, pues, más allá de la curiosidad de Herodes por saber “quién es ese que hace semejantes cosas”, llama la atención que el pueblo, que cree conocer a Jesús, lo confunde con personajes históricos: Juan el Bautista, Elías, o alguno de los antiguos profetas que ha resucitado… Anclados en el pasado, no son capaces de “ver lo nuevo”, la novedad de Dios: al Mesías y Señor, por falta de fe en el Hijo de Dios.
Sólo por fe podemos aceptar a Jesús como el Redentor de la humanidad, el “mediador” entre Dios y los hombres. La fuerza determinante de la fe es la inspiración interior del Espíritu, y con esta ayuda podemos oír a Dios que llama a nuestra puerta y nos invita a creer en su Hijo, a conocerlo y no esperar que otros nos digan quién es Jesús de Nazaret. La iniciativa siempre parte de Dios, a nosotros nos toca responder afirmativamente a su amor. Por esto es tan importante la oración. Pedir a Dios que sostenga nuestra fe. Herodes no sabía quién era Jesús. Nosotros sí lo sabemos: es el Hijo de Dios, el único que tiene “palabras de vida eterna”. Por esta razón queremos “ver a Jesús”, y por ello acudimos a la Eucaristía, porque en ella está presente Cristo Jesús con su cuerpo, con su sangre, con su divinidad. Con Él nos quedamos y de Él recibimos la gracia.

¿Mi deseo de ver y de escuchar a Jesús es para obedecer a su Palabra o por pura curiosidad?

Oración: Señor, las actividades diarias pueden alejarnos de tu amor y buscarte por pura necesidad; danos la capacidad de conocerte cada día más y seguirte con convicción. Amén.


“Nuestro deseo de ver y escuchar a Jesús es para obedecer su Palabra, no por pura curiosidad o necesidad”


miércoles, 26 de septiembre de 2018

Evangelio del Día


Miércoles 26 de Septiembre de 2018

“UN CORAZÓN DISPONIBLE, ESTA ES LA CLAVE”


PRIMERA LECTURA

PROVERBIOS 30, 5-9

“No me des riqueza ni pobreza, concédeme mi ración de pan”

La palabra de Dios es acendrada, él es escudo para los que se refugian en él.
No añadas nada a sus palabras, porque te replicará y quedarás por mentiroso.
Dos cosas te he pedido; no me las niegues antes de morir: aleja de mí falsedad y mentira; no me des riqueza ni pobreza, concédeme mi ración de pan; no sea que me sacie y reniegue de ti, diciendo: "¿Quién es el Señor?"; no sea que, necesitando, robe y blasfeme el nombre de mi Dios. 

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL: 118

R. / “Lámpara es tu palabra para mis pasos, Señor”

Apártame del camino falso,
y dame la gracia de tu voluntad. R.

Más estimo yo los preceptos de tu boca
que miles de monedas de oro y plata. R.

Tu palabra, Señor, es eterna,
más estable que el cielo. R.

Aparto mi pie de toda senda mala,
para guardar tu palabra. R.

Considero tus decretos,
y odio el camino de la mentira. R.

Detesto y aborrezco la mentira,
y amo tu voluntad. R.


LECTURA DEL EVANGELIO

LUCAS 9, 1-6

“Los envió a proclamar el Reino de Dios y a curar a los enfermos”

En aquel tiempo, Jesús reunió a los Doce y les dio poder y autoridad sobre toda clase de demonios y para curar enfermedades. Luego los envió a proclamar el Reino de Dios y a curar a los enfermos, diciéndoles: "No llevéis nada para el camino: ni bastón, ni alforja, ni pan, ni dinero; tampoco llevéis túnica de repuesto. Quedaos en la casa donde entréis, hasta que os vayáis de aquel sitio. Y si alguien no os recibe, al salir de aquel pueblo sacudíos el polvo de los pies, para probar su culpa".  Ellos de pusieron en camino y fueron de aldea en aldea, anunciando la Buena Noticia y curando en todas partes. 

Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

Un corazón disponible, ésta es la clave

Jesús llama y Jesús envía. Los que aceptan su llamado son los que han sabido ver, han sabido escuchar la voz del Señor, que los invita a la misión. Y tienen la responsabilidad de ir a “hacer” lo que han visto y “anunciar” lo que han oído del mismo Jesús, que es la proclamación del Reino de Dios. Y tienen que hacerlo, no confiando en su poder o en las cosas que tengan, sino confiando sólo en las palabras de Jesús y en la fuerza del envío.
Tienen que evangelizar con su estilo de vida: sin miedo y sin exageraciones. Respetando la voluntad de los oyentes y siendo agradecidos con la generosidad de la gente. Sin desconocer, eso sí, que también están expuestos al rechazo, incluso al maltrato. Pero “el Señor es un escudo para cuantos confían en Él”. Todo parece fácil. La pregunta es: ¿cómo encarnamos esta Palabra? “Un corazón disponible. Ésta es la clave”, dice el papa Francisco. Generalmente ponemos nuestro esfuerzo en otros medios que pueden ser eficaces, pero, señala el Papa, “para transformar el corazón y sanar sólo hace falta la Palabra, un oído atento y un corazón dispuesto. Dios provee todo lo demás”. Aceptemos el reto de anunciar con la vida la Palabra, la Buena Noticia de Jesús. Ésta es una manera de hacer vida, de practicar la Palabra que hemos escuchado.
“La vida es caminar. Caminemos siempre buscando a Dios, atentos, incansables y valientes” (Papa Francisco).

Oración: Señor, quiero ponerme en camino para predicar tu Reino con mi testimonio de vida. Dame tu gracia para ser un auténtico discípulo y misionero de tu amor. Amén.


“La vida es caminar. Caminemos siempre buscando a Dios, atentos, incansables y valientes” (Papa Francisco)


martes, 25 de septiembre de 2018

Evangelio del Día


Martes 25 de Septiembre de 2018

“LOS QUE SON SU MADRE Y SUS HERMANOS”


PRIMERA LECTURA

PROVERBIOS 21, 1-6. 10-13

“Diversas sentencias”

El corazón del rey es una acequia en manos de Dios, la dirige adonde quiere.
Al hombre le parece siempre recto su camino, pero es Dios quien pesa los corazones.
Practicar el derecho y la justicia Dios lo prefiere a los sacrificios.
Ojos altivos, mente ambiciosa, el pecado es el distintivo de los malvados.
Los planes del diligente traen ganancia, los del atolondrado traen indigencia.
Tesoros ganados por boca embustera son humo que se disipa y lazos mortales.
Afán del malvado es buscar el mal, no mira con piedad a su prójimo.
Cuando el cínico la paga, aprende el inexperto, pero el sensato aprende con la experiencia.
El honrado observa cómo la casa del malvado precipita al malvado en la ruina.
Quien cierra los oídos al clamor del necesitado no será escuchado cuando grite. 

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL: 118

R. / “Guíame, Señor, por la senda de tus mandatos”

Dichoso el que, con vida intachable,
camina en la voluntad del Señor. R.

Instrúyeme en el camino de tus decretos,
y meditaré tus maravillas. R.

Escogí el camino verdadero,
deseé tus mandamientos. R.

Enséñame a cumplir tu voluntad
y a guardarla de todo corazón. R.

Guíame por la senda de tus mandatos,
porque ella es mi gozo. R.

Cumpliré sin cesar tu voluntad,
por siempre jamás. R.

EVANGELIO DEL DÍA

LUCAS 8, 19-21

“Mi madre y mis hermanos son éstos: los que escuchan la palabra de Dios y la ponen por obra”

En aquel tiempo, vinieron a ver a Jesús su madre y sus hermanos, pero con el gentío no lograban llegar hasta él. Entonces lo avisaron: "Tu madre y tus hermanos están fuera y quieren verte." Él les contestó: "Mi madre y mis hermanos son éstos: los que escuchan la palabra de Dios y la ponen por obra." 

Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

Éstos son mi madre y mis hermanos

Todo sacrificio ofrecido a Dios debe ser un acto de adoración y reconocimiento de su soberanía sobre todos los bienes. Pero estos bienes, Dios los ha dado para el disfrute de todas las personas, por eso, el “sacrificio” exige el deber de practicar la “justicia” y respetar el “derecho” de cuantos tienen necesidad. Si no sabemos compartir los bienes que tenemos, estamos quebrantando el derecho de los necesitados, cerramos el oído a su clamor y merecemos ser medidos con la misma medida que usamos nosotros.
Lucas evidencia la situación de los que están “fuera” de la comunidad de Jesús, “la madre y los hermanos” que parecen simbolizar a Israel (madre) y a los judíos (hermanos), a los que Jesús está vinculado por raza y tradición, pero ellos no lo aceptan y tampoco la salvación que viene de Dios. Se han quedado anclados en el rito, pero su corazón está lejos del Dios que dicen creer. Quieren “ver” a Jesús, pero no quieren escucharlo, y, por ende, no pueden entrar a formar parte de su “verdadera” familia, que está compuesta por aquellos que tienen su corazón atento y dispuesto a acoger la Palabra de Dios y hacerla vida. El mejor testimonio de esta familiaridad de Jesús es la Virgen María, Madre de Jesús y Madre nuestra, vinculada al Señor por la “sangre” espiritual de la fe y el amor. Ella “escuchó” a Dios desde lo profundo de su corazón y le dio su sí incondicional. Puso en sus manos la vida entera, y en esa vida se “encarnó” el propio Dios.

¿Sentimos a los otros como hermanos, como prójimos?

Oración: Padre santo, te pido que me ayudes a vivir de tal manera, que mi testimonio pueda llevar tu mensaje de amor a todos los que me rodean. Amén.


“Si nos disponemos a ver, escuchar y obedecer a Dios, podremos ser parte de la familia de Jesús”